divendres, 5 de novembre del 2010

ORNITORRINCO

Irreverencia sórdida momentaneamente inaceptable de síncope insustancialmente caótica cuya silla y servilleta fueron terriblemente mordidas por una falacia memorablemente fraticida de sesgos y cuadros en formación de champiñones oscuros o de colores amarillos, verdes, azules, sapos, lechugas, zanahorias. Flatulencia súbita de amor viscoso la cual estalla en mil alaridos sientiéndome ahogado en mi tiempo orgánico mosquito cada vez más gaviota en el rompeolas del nuncio metido en lata e incomprensible pelicula de melancolía infinita con melón en lapicero arrastrado por grupos de extrema izquierda a un final eterno de voces mudas y luces convertidas en cernícalos rebosantes de puro cigarro escondido en una caja de zapatos viejos.