divendres, 14 de novembre del 2008

La abolición del trabajo

Nadie debería trabajar.

El trabajo es la fuente de casi toda la miseria en el mundo. Casi todos los males que puedas mencionar provienen del trabajo, o de vivir en un mundo diseñado para el trabajo. Para dejar de sufrir, tenemos que dejar de trabajar.[...]

Los liberales dicen que deberíamos acabar con la discriminación en los empleos. Yo digo que deberíamos acabar con los empleos. Los conservadores apoyan leyes del derecho-a-trabajar. Siguiendo al yerno descarriado de Karl Marx, Paul Lafargue, yo apoyo el derecho a ser flojo. Los izquierdistas favorecen el empleo total. Como los surrealistas -- excepto que yo no bromeo -- favorezco el desempleo total. Los Troskistas agitan por una revolución permanente. Yo agito por un festejo permanente.[...]

La alternativa a trabajar no es el ocio sólamente. Ser lúdico no es ser estático. Aunque valoro el placer de la pereza, nunca es mas satisfactoria que cuando sirve de intermedio entre otros placeres y pasatiempos. Tampoco promuevo esa válvula de seguridad disciplinada y gerenciada llamada "tiempo libre"; nada de eso. El tiempo libre es no trabajar por el bien del trabajo. El tiempo libre es tiempo gastado en recobrarse del trabajo, y en el frenético pero inútil intento de olvidarse del trabajo.[...]

El trabajo hace de la libertad una burla. El discurso oficial dice que todos tenemos derechos y vivimos en una democracia. Otros desafortunados que no són libres como nosotros tienen que vivir en estados policiales. Estas víctimas obedecen órdenes "¡o si no...!", sin importar cuán arbitrarias. Las autoridades les mantienen bajo supervisión constante. Los burócratas del Estado controlan hasta los detalles más pequeños de la vida diaria. Los oficiales que les empujan de un lado a otro sólo responden ante sus superiores, públicos o privados. De cualquier modo, la disensión y la desobediencia són castigados. Los informantes reportan regularmente a las autoridades. Se supone que todo esto es muy malo. Y lo es, exepto que no es sino una descripción del puesto de trabajo moderno. Los liberales y conservadores y anarco-capitalistas que lamentan el totalitarismo són falsos e hipócritas. Hay mas libertad en cualquier dictadura moderadamente desestalinizada que en el típico puesto de trabajo estadounidense. [...]

El humillante sistema de dominación que he descrito rige sobre la mitad de las horas de vigilia de una mayoria de mujeres y la vasta mayoría de los hombres por décadas [...] no es del todo erróneo llamar a nuestro sistema democracia o capitalismo o -- mejor aún -- industrialismo, pero sus verdaderos nombres són fascismo de fábrica y oligarquía de oficina. Quien diga que esta gente es "libre" es un mentiroso o un estúpido.[...]

Directa o indirectamente, el trabajo matará a la mayoría de los que lean estas palabras. Entre 14.000 y 25.000 trabajadores mueren en este país anualmente en el lugar de trabajo. Mas de dos millones quedan deshabilitados. De veinte a veinticinco millones són heridos cada año. Y estas cifras se basan en una estimación muy conservadora acerca de qué constituye una herida relacionada con el trabajo.[...] Aún si no quedas muerto o inválido mientras trabajas, también puedes morir mientras vas al trabajo, regresas del trabajo, buscas trabajo, o tratas de olvidarte del trabajo. [...]

Lo que he dicho hasta ahora no debería ser controversial. Muchos trabajadores están hartos del trabajo. Las tasas de ausentismo, despidos, robo y sabotaje por parte de empleados, huelgas ilegales, y flojera general en el trabajo són altas y van subiendo. Podría haber un movimiento hacia un rechazo consciente y no sólo visceral del trabajo. Y sin embargo, el sentimiento prevalente, universal entre los patronos y sus agentes, y muy extendida entre los trabajadores mismos, es que el trabajo mismo es inevitable y necesario.[...]

Abolir el trabajo requiere ir hacia él desde dos direcciones, cuantitativa y cualitativa. Por el lado cuantitativo, hemos de recortar masivamente la cantidad de trabajo que se hace. En la actualidad, la mayor parte del trabajo es inútil o peor, y deberíamos deshacernos de él. Por el lado cualitativo -- y pienso que esta es la base del asunto, y el punto de partida nuevo y revolucionario -- hemos de tomar el trabajo útil que queda y transformarlo en una agradable variedad de pasatiempos parecidos al juego y la artesanía, que no se puedan distinguir de otros pasatiempos placenteros, excepto que sucede que generan productos útiles.[...] Pero la mayoría del trabajo no vale la pena salvarlo.[...]

No más producción de guerra, energía nuclear, comida chatarra, desodorante de higiene femenina -- y por sobre todo, no más industria automovilística digna de ese nombre. [...]

odos los científicos, ingenieros y técnicos, liberados de molestarse en investigación de guerra y obsolecencia planeada, se la pasarían en grande inventando medios para eliminar la fatiga, el tedio y el peligro de actividades como la minería. Sin duda hallarán otros proyectos en qué divertirse.[...]



1 comentari:

Anònim ha dit...

Gran post. Sarcàsticament utòpic.

Desviaré un poc es tema que has tractat sense descarrilar del tot. Me centraré un poc en termes politics, aprofitant sa conjuntura internacional.

Una reflexió:
· Esquerra extrema o comunisme moderat?
Com tots dos sabem, no es cap aberració xerrar de comunisme a s'actualitat, no s'ha d'associar sa idea de comunisme a la promulgada per Trotski, Stalin, Lenin, Hitler, Mussolini, Mao o Castro per citarne alguns. El comunisme va aportar grans avanços industrials i socials a més de una visió claramente futurista de cara a l'evolució global del mon. Basant-se en l'extinció de classes i la igualtat social, s'acabaría amb els episodis de corrupció estatal i obririem una etapa d'expansió mercantil molt potent.

Per acabar, citaré al pare d'aquesta corrent, Karl Marx: El comunismo... es la auténtica resolución del antagonismo entre el hombre y la naturaleza y entre el hombre y el hombre; es la auténtica solución del conflicto entre la existencia y la esencia, entre la objetividad y la autoafirmación, entre la libertad y la necesidad, entre el infividuo y la especie. Es el acertijo de la historia resuelto.